Para reflexionar

MIRANDO HACIA EL INFINITO

Después de la Segunda Guerra Mundial, un joven piloto decidió hacer una peligrosa y larga travesía, utilizando un avión pequeño monomotor. El reto era grande y requería de mucha energía y concentración.

Avanzado en su viaje, sus instrumentos comenzaron a comportarse en forma extraña y, al investigar, se dio cuenta que llevaba una rata en el avión, que estaba royendo los cables.

En ese instante recordó algo que le había enseñado su instructor:

"Cuando encuentres ratas en tu vuelo, en vez de gastar tu energía y ponerte en peligro peleando con ellas, ¡elévate! Elévate lo más que puedas, las ratas no resisten la altura". (Desconozco su autor)

Algunas veces tenemos pensamientos y emociones que son como esas ratas. Las ratas sólo son los fantasmas creados por nuestros miedos.

Cuando esto nos ocurra debemos tomar distancia del suelo. Recordando  que podemos dirigir nuestros controles hacia un universo entero de posibilidades y dejar atrás los obstáculos que impidan nuestro crecimiento y desarrollo personal. Volemos tan  alto como nuestros sueños, y cuando sintamos los vientos del peligros, no miremos para abajo, siempre miremos hacia arriba, hacia el azul infinito porque ese es el sitio al cual pertenecemos.

Que  Dios  los bendiga  y guarde con bien.
Con mucho cariño Verónika, caminando siempre hacia las estrellas!!

Tecnologia médica

Un equipo español logra introducir ADN en el núcleo de las células mediante nanopartículas


El hallazgo, conseguido por investigadores de la UAB, inaugura una nueva categoría de nanopartículas con utilidad terapéutica.
   
Científicos de la Universitat Autónoma de Barcelona (UAB) han logrado liberar directamente material genético en el interior del núcleo de las células, lo que permite aumentar la eficacia de los procesos de transferencia genética, que no se reduce durante el paso de este material por el citoplasma.

La liberación se produce "directamente" dentro del núcleo, mediante partículas con forma de disco de unos pocos nanómetros - que el equipo ha bautizado como nanodiscos-. De este modo, los investigadores han logrado demostrar que las partículas se mueven 10 veces más rápido que si su difusión en el interior de la célula se hiciera de forma pasiva.

"Los nanodiscos se ensamblan automáticamente, se mueven rápidamente, son estables a lo largo de todo el recorridos y viajan hacia el interior del núcleo, por lo que son muy prometedores para ser utilizados como prototipos para la administración segura de ácidos nucleicos y de proteínas funcionales", ha señalado la responsable del proyecto, Esther Vázquez.

Una alternativa prometedora
La investigación, publicada en las revistas Biomaterials y Nanomedicine, ha sido liderada por el investigador del Instituto de Biotecnología y Biomedicina de la UAB Antonio Villaverde, que ha contado también con la participación del Instituto de Ciencia de Materiales del CSIC, de la Institución Catalana de Investigación y Estudios Avanzados y de la Universitat Politécnica de Cataluña (UPC).

La terapia génica pretende tratar diversas enfermedades con ácidos nucleicos, si bien parte de la dificultad radica en asegurar la correcta absorción por parte de la célula del material genético, sin que se produzcan excesivas pérdidas y sin efectos secundarios indeseados.

Actualmente, indica la UAB, los virus naturales desactivados son los vectores más utilizados en los ensayos clínicos, aunque esta modalidad de transferencia limita la aplicación terapéutica. Una alternativa es la utilización de virus "artificiales", construidos mediante ingeniería genética, a partir del ensamblaje de diminutas estructuras proteicas que, a su vez, están hechas de péptidos.

La investigación liderada por Villaverde ha demostrado que el péptido denominado R9 puede encapsular material genético, ensamblarse con otras moléculas idénticas formando nanopartículas, y penetrar directamente en el núcleo de la célula para liberar el material transportado.

Fuente:
Biomaterials; Volume 31, Issue 35, December 2010, Pages 9333-9339

Tecnologia médica

Identifican un mecanismo que revierte los efectos del envejecimiento en ratones

Un estudio demuestra que la reactivación de la enzima telomerasa revierte la degeneración de los tejidos asociada a la edad en órganos como el intestino o el bazo, así como la neurodegeneración.
   
Las estrategias que ayudan a mantener con buena salud los finales protectores de los cromosomas podrían detener, y quizás incluso revertir, la degeneración de tejidos asociada a la edad, según un estudio del Instituto del Cáncer Dana-Farber en Boston, Estados Unidos, que se publica en la edición digital de la revista Nature.

Con el paso del tiempo y la división celular, las puntas protectoras de los cromosomas, denominadas telómeros, gradualmente se desgastan. En el estudio, los investigadores comprobaron cómo los ratones que carecen de la enzima telomerasa que produce los telómeros experimentan una atrofia progresiva de los tejidos, la pérdida de células madre, el fallo orgánico y un deterioro en la cicatrización.
Sin embargo, los autores muestran que la reactivación de la enzima ayuda a restablecer los telómeros, activa a las células en letargo para que comiencen a dividirse y revierte la degeneración de los tejidos en muchos órganos diferentes incluyendo testículos, bazo e intestino.

Los resultados muestran, además, que la reactivación de la telomerasa también revierte la neurodegeneración, desencadenando la proliferación de progenitores neurales, la generación de nuevas neuronas y un mejor sentido del olfato.

El estudio, dirigido por Ronald DePinho, indica que dadas las señales correctas, los órganos que están envejeciendo podrían ser capaces de “dar macha atrás al reloj” y revertir la atrofia asociada a la edad. Sin embargo, aunque advierten que no se observaron tumores en los ratones estudiados, los autores advierten que la reactivación o aplicaciones prolongadas de la telomerasa a edad avanzada podrían provocar la formación de cánceres.

FUENTE: REVISTA NATURE EE.UU.